El cálculo de la pensión preocupa a las asociaciones de autónomos

Alicia Alegre. Después del revuelo causado por las declaraciones sobre pensiones de la ministra de Empleo y Seguridad Social, Fátima Báñez, los principales representantes de las asociaciones de autónomos nacionales han querido matizar la propuesta en declaraciones a El Nuevo Autónomo.

El debate está servido desde que la ministra Fátima Báñez se pronunciara sobre la posibilidad de que los futuros jubilados puedan ampliar el cálculo de la pensión con toda su vida laboral de forma voluntaria, en una entrevista de TVE. Desde entonces, tanto representantes de la oposición como los propios afectados por la reforma, las asociaciones de autónomos y trabajadores, se han pronunciado al respecto.

Durante la entrevista del lunes, la ministra de Empleo y Seguridad Social, destacó que algunos trabajadores «han tenido cotizaciones muy altas al principio o a mitad de su vida laboral» pero que luego tienen una pensión baja.

Se trata, aclaró Báñez, de quienes han sufrido las consecuencias de la crisis económica. Ya bien despedidos por expedientes de regulación de empleo (ERE) o por los que han pasado a ejercer una actividad como autónomos, cotizando lo mínimo a la Seguridad Social debido a los problemas de contratación de mayores de 50 años, al final de su vida laboral.

«Estamos pensando que pueda tenerse en cuenta, no los últimos años de cotización, sino incluso poder elegir durante toda la carrera laboral porque mejoraría la pensión futura», dijo Báñez y añadió: «Veremos si ve la luz».

De esta manera, el Grupo Popular ha propuesto a la Comisión del Pacto de Toledo ampliar el periodo de cálculo de la pensión a toda la vida laboral de forma voluntaria, según adelantó la ministra, y desde que se pronunció son numerosas las asociaciones que han contestado al respecto.

Las asociaciones de autónomos responden

El presidente de la Confederación Intersectorial de Autónomos del Estado Español (CIAE), Miguel Ángel Blanco, considera que la reforma es «positiva pero con matices». Según a declarado a este periódico: «La medida es buena siempre en el caso de que sea el jubilado el que escoja el cálculo de años cotizados. Sin restricciones, que cada trabajador siga su criterio sin restricciones». Y es que el presidente considera que en el caso de que la administración intervenga, no habrá ningún «cambio real».

Por otro lado, Blanco destaca que fueron «muchos los jubilados que debido a la crisis económica se vieron obligados a jubilarse con una pensión muy baja. La nueva medida debería contemplar una reestructuración de las pensiones de los años anteriores para que no sea descompensatorio para el resto de jubilados».

Por su parte, Lorenzo Amor, presidente de la Asociación de Trabajadores Autónomos (ATA) también ve positiva la propuesta: «Favorecería a aquellos trabajadores de más de 50 años que han visto cómo sus ingresos se reducían en los últimos años de vida laboral por la crisis. Por haber sido despedidos o porque han sufrido recorte de sueldo o porque han  decidido emprender y lo han hecho por la mínima».

Asimismo, no cree que exista ningún inconveniente para los que prefieran que no se cambie el periodo de cálculo ya que «no perjudicaría a aquellos que han cotizado más los últimos años puesto que al ser voluntario esta nueva fórmula de cambio, podrían quedarse con la opción actual».

Hay que tener en cuenta que la medida que estudia el Pacto de Toledo está pensada para trabajadores con largas carreras de cotización y que tengan derecho al cien por cien de la pensión. «En 2009 ATA ya propuso tomar como referencia los quince mejores años de cotización y los cinco peores. Así se evitaría, por ejemplo, que trabajadores que han estado cotizando los últimos 15 años por la base máxima tengan mejor pensión que otros que han tenido una vida laboral de 35 a 45 años y han cotizado por una base media.  Con esta medida, insisto, de carácter voluntario, la pensión de los autónomos se incrementaría entre un 12 y un 15% de media».

También ha introducido matices otra de las principales asociaciones de autónomos: UATAE. Fuentes de esta organización han destacado a El Autónomo Digital que la propuesta es solo un esbozo: «Pensamos que la música de la propuesta de la ministra Báñez suena bien, pero hay que tener en cuenta que es solo un esbozo: la propuesta no está detallada ni ha puesto sobre la mesa una propuesta cerrada y sólida».

Además, recuerdan desde UATAE, «si finalmente quiere llevarla a cabo, la propuesta de la ministra tiene que ponerse a debate y atravesar varios trámites legislativos, así que tenemos que ser prudentes con el resultado».

«Es cierto que la propuesta de la ministra cumple el objetivo de que los expulsados al final de su vida laboral tengan la posibilidad de escoger una opción que pueda terminar no perjudicando a su jubilación. Pero esta propuesta podría llegar a ser buena siempre que la posibilidad sea opcional y voluntaria», concluyen.

La legislación actual

El periodo para calcular las pensiones públicas que corresponden a cada trabajador pasó de los 15 años del 2012 a los 25 (de manera progresiva), según se acordó en la reforma aprobada en el verano del 2011. Desde el 2013 comenzó a aumentar gradualmente de 15 a 25 años el periodo de cómputo legal para calcular la pensión de jubilación, con lo que en el 2018 se hará con los últimos 21 años cotizados y en el 2022 se llegará a los 25 años, de acuerdo con lo establecido en la reforma de las pensiones acordada por el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero y los agentes sociales en el 2011.

La aplicación total de esa norma también será progresiva, al igual que la ampliación de la edad legal de jubilación, aunque tendrá una aplicación más acelerada porque en el 2022 ya estará plenamente vigente.

La ampliación del periodo de cómputo también entró en vigor el 1 de enero del 2013, y ha aumentado a razón de un año por cada año que pasa, de forma que en el 2018 pasa a ser de 21 años. Algunos cálculos apuntan a efectos de bajada o subida del 1% de las pensiones en el caso del Régimen General y algo mayor para los autónomos como consecuencia de su aplicación.

La reforma de pensiones de 2013 contemplaba la ampliación progresiva del periodo de cálculo de la pensión de 15 a 25 años. Para 2018, la cuantía de la pensión se calcula en función de las bases de cotización de los 21 años inmediatamente anteriores al mes previo al de la jubilación. Para 2022, el periodo de cálculo será de 25 años.

La reforma de 2013 también establece que los trabajadores de más edad expulsados prematuramente del mercado laboral, incluidos los trabajadores autónomos, pueden optar desde el 1 de enero de 2017 por la aplicación de un periodo de 25 años para el cálculo de la pensión si ello les resulta más favorable.